Con el término «agujetas» se definen los dolores musculares difusos que aparecen tras ejercicio intenso y prolongado en sujetos no entrenados. Habitualmente el dolor aumenta a las 24 horas que siguen al ejercicio, para alcanzar el cénit entre éstas y las 78 horas siguientes y disminuir durante los 5-7 días posteriores al ejercicio.
La musculatura se encuentra contracturada con dolor a la movilidad activa y pasiva e incluso a la palpación. El dolor se localiza en la unión musculotendinosa, ya sea proximal o distal, aunque si el ejercicio ha sido muy intenso es habitual su localización a lo largo de todo el trayecto muscular.
El magnesio interviene a dos niveles: ataca directamente la contractura muscular y colabora en la absorción del calcio, otro mineral importante con efectos sobre la contracción y la relajación muscular.
Evidentemente, no hay que olvidarse del precalentamiento de rigor antes de realizar cualquier esfuerzo, ni de hidratarse a fondo durante el mismo, ni de los estiramientos posteriores.